Dicen que el amor es ciego pero yo creo que sería más apropiado decir que el amor ciega.

#1 @maximilio123 Es una enfermedad mental del espectro de los trastornos psicóticos. La esquizofrenia es un distanciamiento de la realidad caracterizada por experiencias delirantes. Los síntomas más claros son las alucinaciones (casi siempre auditivas, las alucinaciones visuales son extremadamente raras salvo si hay drogas implicadas) y pensamientos delirantes. Los pensamientos delirantes son ideas que te asaltan, casi podríamos decir que "irrumpiendo" en el curso normal del pensamiento.

La forma paranoide es la más común de las esquizofrenias y la menos incapacitante. Lo que ocurre es que en momentos concretos te llegan de repente pensamientos que no puedes simplemente olvidar o "pensar en otra cosa" de sospechas infundadas de que alguien te persigue, quiere hacerte daño o es hostil hacia ti. Por ejemplo, alguien te prepara la comida y sin ningún motivo te asalta la idea de que pretende envenenarte (no en el sentido de que se te ocurra una tontería y ya sino que te llega una fuerte convicción de ello aunque intentes pensar en lo contrario o aunque haya pruebas evidentes de que no es así). Las alucinaciones suelen ser voces que comentan lo que haces o lo que piensas como si hubiera alguien cerca de ti criticándote o amenazándote. A veces puede ser al contrario y parece una voz amigable que intenta avisarte de que alguien va a atacarte o tiene malas intenciones hacia ti.

#11 @croqueteibol Dudo mucho un diagnóstico errado en estas circunstancias y en el caso de esta enfermedad. La esquizofrenia es una condición con síntomas patognómicos muy claros y muy evidentes. Aún así, ese diagnóstico no se da a la ligera, se sigue un criterio de exclusión que va descartando las posibles causas en un orden específico para asegurarse de que no haya otros factores subyacentes y normalmente el "examen" al que ella se refiere será una batería de pruebas específica para ese diagnóstico. Lo más probable es que antes de esa prueba haya pasado por varios exámenes preliminares y posiblemente haya visitado a varios especialistas. Típicamente se empieza con entrevistas con un psicólogo especialista en la edad de la persona, luego con un psicólogo clínico y finalmente con un psiquiatra. Lo más seguro es que antes de hablar de esquizofrenia haya pasado por pruebas para descartar tóxicos y enfermedades físicas (lo típico es un análisis completo de sangre y una resonancia magnética).

#13 @cherenkov Otra cosa que quería comentar sobre las relaciones personales. No he conocido a nadie cercano con trastornos psicóticos pero una persona muy cercana a mi padece un trastorno del espectro autista. Aunque saberlo siempre duele, ese conocimiento puede llegar hasta a ser un alivio. El saber que hay una explicación a ciertas conductas "extrañas" facilita el empatizar con esa persona, te ayuda a comprenderla mejor y hasta hace más fácil tratarla. Como dije antes, al principio siempre es un poco incómodo porque no sabes si algo que vas a decir o a hacer va a desencadenar algún efecto de esa condición pero con el tiempo te acostumbras a tratar a la persona con naturalidad y aceptas eso como una particularidad suya.

A todos, intentémos evitar el estigma que suponen las enfermedades mentales. Entender que un esquizofrénico (o un autista, ya que estamos) no es un "loco" ni una persona peligrosa es algo que mejora la calidad de vida tanto de esas personas como de las que están a su alrededor y facilita muchísimo el tratamiento.

Para los que no lo sepan, la esquizofrenia paranoide es un tipo de enfermedad mental en el que se presentan síntomas psicóticos, principalmente alucinaciones auditivas (por mucho que el cine nos haya convencido de lo contrario, las alucinaciones visuales son muy raras, casi nunca se dan salvo cuando hay un fármaco psicodélico implicado) y pensamientos delirantes, sobre todo delirios de persecución (la idea súbita de que alguien te persigue o pretende dañarte, son pensamientos que aparecen en situaciones completamente inocentes e incluso con familiares o personas cercanas).

Sé que es una situación jodida, sobre todo al principio aceptar el estigma que supone un diagnóstico pero mira la parte positiva. Para empezar, el diagnóstico ya facilita el acceso al tratamiento y ya tienes una explicación a las conductas y pensamientos extraños que te asaltaban y el saber la causa te puede ayudar a
controlar cómo respondes a esos síntomas. Ten en cuenta también que la forma paranoide es el tipo de esquizofrenia que mejor responde al tratamiento y que mejor pronóstico tiene. Es mucho peor sufrir una hebefrenia o una esquizofrenia catatónica.

Sobre las relaciones personales. Al principio siempre habrá una etapa "rara" en la que tus seres queridos no sabrán muy bien cómo tratar contigo y puede que se den situaciones incómodas pero es importante que sepas que normalmente la gente se adapta a estas cosas y acaban siendo un apoyo importantísimo. Mucha suerte y mucho ánimo.